Tarjetas: el “golpe” a los bancos costará $3.600 M

jueves, 01 de junio de 2017

Es porque deberán reducir los aranceles que retienen en los consumos. Los comercios manifestaron ayer su preocupación por la demora en la baja de comisiones. PRISMA reconoció demoras, pero advirtió que ya está vigente.

 La tensión que generó el avance del Gobierno en el mercado de tarjetas de crédito tiene de fondo una explicación nada despreciable: los 14 bancos dueños de Prisma dejarán de ganar alrededor de $ 3.600 millones en nueve meses de 2017, sólo por el efecto de una norma que aprobó el Banco Central en marzo pasado para reducir los aranceles que cobran sobre los consumos en los comercios.

La pelea incluyó, desde febrero hasta estos días, un bombardeo de acusaciones y maniobras entre funcionarios y banqueros. El Gobierno culpa a este grupo de entidades, por ejemplo, de haber "boicoteado" el programa de precios transparentes que diseñó la Secretaría de Comercio, al no dar la información que necesitaban los negocios para publicar las nuevas tasas de financiación en los planes de 12 y 18 cuotas. Cree que el desplome que hubo en febrero, marzo y abril sobre las compras en cuotas se sintió con más contundencia en los comercios de menor tamaño, que suelen tener pocos recursos para realizar este trabajo. Y consideran que fueron los bancos los que buscaron difundir en los medios de prensa estas cifras sobre la estrepitosa caída del consumo en cuotas.

En la última semana, tal como informó este diario, el Banco Central advirtió a las entidades por la demora en la baja de aranceles que cobran en los pagos con débito y crédito (las tasas de intercambio) y amenazó con aplicarles una sanción. Ayer, la Cámara Argentina de Comercio (CAC) emitió un comunicado en el que manifestó su preocupación ante la eventual falta de cumplimiento de Prisma (Visa) de la disposición del BCRA. Y sólo unas horas después, PRISMA salió a aclarar que se había cumplido con la regulación en "todas las transacciones con tarjetas de crédito y débito ocurridas desde el 1 de abril 2017". Con todo, reconoció que los sistemas quedaron ajustados recién en mayo al tener que modificar "el modo de distribución de los ingresos por aranceles en los sistemas operativos de PRISMA".

La última norma del BCRA resultó explosiva y generó un temblor en estas grandes entidades del sistema financiero. Según cálculos que elaboró este diario con datos del sector y estimaciones del consultor de medios de pago, Alexis Vaisman, el total de las comisiones que se retendrán desde marzo hasta abril a los comercios por los pagos con débito y crédito ascenderá a los $16.000 millones (ver infografía). Con las antiguas tasas de intercambio (del 1,3% con débito y el 2,7% en crédito), lo percibido por las entidades habría sumado $14.200 millones; pero con las nuevas, modificadas por el BCRA y vigentes desde el 1 de abril, esa percepción quedará reducida a $10.600 millones.

Así, los bancos dejarán de ganar, sólo por este concepto, unos $3.600 millones en total. Los principales damnificados de este "golpe normativo" serán el Santander y el Galicia, que hoy tienen en conjunto más de un 30% de participación en PRISMA; y el BBVA, que hoy tiene 10%.

El impacto que puede provocar sobre los balances de las entidades deberá ser compensado con otros recursos. Esta semana, por caso, las principales entidades se difundieron en algunos medios un nuevo aumento del 15% (el segundo en un año) en las comisiones que cobran a los clientes por sus productos y servicios. Una nueva embestida, ahora desde el sector financiero, que parece no dar por terminada la pelea.

Fuente: Ambito