Sturzenegger le dijo a los bancos que bajen rentabilidad y ganen volumen

martes, 06 de septiembre de 2016

En medio de la pelea entre comercios y bancos por los costos de tarjetas advirtió que los márgenes de las entidades caerán si la inflación baja. Valoró un dictamen negativo de Defensa de la Competencia sobre tarjetas y propuso a bancos pequeños competir contra los plásticos.

El presidente del Banco Central (BCRA), Federico Sturzenegger, aprovechó ayer un congreso de marketing financiero para advertir a los bancos que busca hacer caer sus márgenes de ganancia con la esperanza de que aumente el volumen del negocio financiero. También valoró un reciente informe de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia que acusó de abuso de posición dominante al principal actor del mercado de tarjetas ?propiedad de 14 bancos? e invitó a las entidades pequeñas a hacerle competencia a los plásticos a través de mecanismos de pago electrónico. Las ganancias de los bancos privados crecieron 58% entre diciembre y junio en comparación con mismo período del año anterior, por sobre el 40% de inflación que miden consultoras privadas.

Sturzenegger fue el primer orador en el 32º Congreso Internacional de Marketing Financiero de la Asociación de Marketing Bancario Argentino (A.M.B.A.), un evento que trata sobre estrategias de mercado e incorporación de tecnologías a negocio bancario. Allí, el titular de la entidad hizo referencia a la incorporación de nuevos servicios digitales como el depósito de cheques vía teléfonos inteligentes (ver página 3), entre otros. Pero también dio un mensaje a los gerentes de bancos respecto de cuál es su futuro deseado.

"Durante los últimos años, el sector financiero ha venido recibiendo un abundante subsidio: el del impuesto inflacionario", dijo Sturzenegger. "El sistema financiero argentino ha sido uno de los principales beneficiarios de este impuesto, dado que cuando recibe depósitos a la vista (ya sea en cuenta corriente, como en caja de ahorro) los toma a un costo nulo o prácticamente nulo, pero luego la entidad financiera invierte estos fondos que recibe casi gratis a través del otorgamiento de préstamos o en instrumentos financieros, que le retribuyen una rentabilidad positiva. Cuanto mayor sea la inflación en el país, mayor es la diferencia entre esa tasa pasiva y la activa, y por consiguiente mayor es dicha rentabilidad", añadió.

"Ahora bien, cuando la inflación finalmente baje en la Argentina (...) el tamaño de este subsidio implícito se reducirá en forma significativa, lo que acotará la rentabilidad del sector", dijo.

Los bancos privados ganaron $ 25.420 millones entre diciembre, mes de la última devaluación, hasta junio (último dato disponible), lo que implicó un salto del 58% de sus resultados frente a una inflación del 39% interanual que mide Elypsis. El aumento en esos resultados sólo es superado por los siete meses posteriores a la devaluación de enero de 2014 cuando esos resultados se dispararon 123% con una inflación del 37%.

El banquero central mencionó la falta de desarrollo del sector financiero argentino en comparación con otros mercados de la región, sostuvo que quien invirtió $ 1 en plazos fijos los últimos 30 años se descapitalizó de manera tal que hoy cuenta con el equivalente a 1 centavo y señaló dos vías por las cuales considera que deberá trabajar la industria: crecimiento de la escala para compensar la supuesta caída de márgenes y una reducción de los costos de operación en el mercado. Como vía para remunera mejor a los ahorros, mientras tanto, el funcionario se refirió a los depósitos en unidades de vivienda (UVI) la moneda indexada que lanzó para crédito hipotecario.

En los últimos meses el BCRA forzó a los bancos a ofrecer cajas de ahorro con sus correspondientes tarjetas de débito en forma gratuita, redujo las condiciones para abrir una cuenta para que personas sin domicilio a su nombre puedan bancarizarse, facilitó las transferencias gratuitas inmediatas y reguló la creación de una serie de mecanismos de pago digital. Esto, en medio de una puja entre las cámaras comerciales y los bancos por los costos de las tarjeta de crédito y débito.

Precisamente en esa pelea intervino ayer Sturzenegger al promocionar el "botón de pago" (una de las tres vías de pago electrónico patrocinadas por la entidad, junto con la billetera electrónica y la transferencia inmediata). "Un banco pequeño por ejemplo, podría acercarse hoy mismo a Carrefour, Garbarino, Rodo, o Coto y ofrecerle un botón de pago con una comisión inferior al 3% que hoy paga por sus ventas online a través de tarjetas de crédito. Es un negocio inmenso, y una oportunidad competitiva extraordinaria. Estoy seguro que muchos ya han identificado esta oportunidad de negocios", desafió. 

Fuente: El Cronista