políticas monetarias

Mala racha: BCRA cumple 8 días de ventas (u$s 247 M)

lunes, 29 de septiembre de 2014

perdió U$S 1.000 M de reservas desde el default

La racha negativa se extiende y obliga al Gobierno a desviar por tercera vez en la década las metas del Banco Central: el organismo acumula ya ocho días de ventas de dólares desde su mesa de dinero, por un total de u$s 247 millones, y una pérdida de casi u$s 1.000 millones desde que la Argentina cayó en default. Frente a esto, Juan Carlos Fábrega se esmeró por hacer llegar al mercado una sola certeza: hará todo lo económicamente posible (e imposible) para lograr que el stock de reservas cierre el año en los 28.000 millones de dólares.

Es un cambio de paradigma en la política monetaria oficial: el objetivo no será este año la inflación, como lo fue en 2003 y 2004 durante la gestión de Alfonso Prat Gay; ni el crecimiento, el empleo y la distribución del ingreso, como quedó establecido a partir de 2012 por la reforma de la carta orgánica que apoyó Mercedes Marcó del Pont; sino, concretamente, el número "psicológico" de reservas con que el organismo planea terminar el año.

El Central muestra así y todo algunos tropiezos hacia ese objetivo en estos días. La corrida contra el dólar lo hizo desprenderse de al menos u$s 247 millones en sólo ocho días hábiles para evitar que el tipo de cambio se disparara por encima de los $ 8,46. La pérdida de reservas fue de u$s 960 millones a partir del 31 de julio (el día siguiente a que la Argentina incumpliera el pago del Discount en dólares), a pesar de que todavía no se contabiliza en ellas el pago de deuda trabado por la decisión del juez Thomas Griesa y de que, presuntamente, el organismo estuvo tomando divisas prestadas por bancos internacionales. El stock cayó, desde entonces hasta hoy, de los u$s 29.003 millones a los u$s 28.043 millones.

El Central se ve obligado a vender en todas las ruedas porque debe enfrentar una estampida en el dólar paralelo, que ya roza los $ 16; una fuerte demanda en el dólar ahorro, que terminará este mes por encima de los u$s 350 millones; y una mayor reticencia a liquidar de los exportadores ante expectativas de devaluación que en el mercado ubican al dólar en los $ 12,50 (NDF, sigla de los futuros en Nueva York a un año). Los esfuerzos por evitar una devaluación se hacen cuesta arriba en un momento en que el dólar se fortalece en el mundo, caen los precios de los commodities y las monedas de la región se debilitan. "Resulta llamativa la situación de la Argentina, pues con una inflación galopante (+40% anual) su moneda fue la que menos se devaluó -al tipo de cambio oficial- en los últimos meses. La Argentina vuelve a ir a contramano de la región y sus desequilibrios no cesan de magnificarse", dijo el economista Federico Muñoz, de Muñoz & Asociados. Sólo en septiembre, las monedas de Brasil, Uruguay y Colombia se depreciaron hasta el 7% por este efecto global, mientras que el peso argentino se mantuvo casi sin cambios.

Es lo que explica que, en su pretensión por cuidar las reservas y mantener el tipo de cambio, Juan Carlos Fábrega deba extremar las restricciones sobre quienes necesitan dólares para producir. El titular del BCRA perseguirá esa meta contra todo. Nadie sabe todavía, con total seguridad, cuál será para fin de año el tipo de cambio oficial, ni el crecimiento de la actividad, ni la inflación ni el desempleo. Pero mientras tanto no hay dudas en el mercado sobre el objetivo de acomodar y ajustar toda la economía (las tasas de interés, las autorizaciones para importar y los límites para comprar dólares, entre otras cosas) en función de mantener los u$s 28.000 millones en las reservas. 

Fuente: Ambito