Cumbre en París

Misión ante el GAFI para sacar al país de listado incómodo

jueves, 26 de junio de 2014

En cumbre clave del grupo antilavado. Silencio en París e intrigas en San Petersburgo.

El Gobierno hará un nuevo pedido ante el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) para que el país deje de integrar la nómina de naciones con monitoreo permanente por parte del organismo que persigue a los lavadores de dinero. Ayer comenzó la cumbre del GAFI en París y el viernes al mediodía se conocerán las conclusiones. El titular de la Unidad de Información Financiera, José Sbatella, y el secretario de Justicia, Julián Lavares, encabezan la comitiva argentina.

Estos funcionarios confían en que esta vez el país ya ha reunido todas las condiciones como para abandonar el incómodo listado. Por ahora, sin embargo, mantienen silencio ya que en otras ocasiones llegaron a estos encuentros con el convencimiento de lograr una mejora para la clasificación de las políticas antilavado y se retiraron sin resultados rutilantes.

Como en esas ocasiones, esta vez el Gobierno volverá a recordar que impulsó la ley antiterrorista en el Congreso, cuerpo normativo que era exigido por el GAFI pero que no contaba con el apoyo de múltiples sectores del Gobierno, especialmente aquellos familiarizados con el ámbito piquetero. Sensibilidades que en 2012 no le impidieron a Julio Alak viajar a la cumbre de Roma con el texto de la ley y con el decreto presidencial que la promulgaba, lo cual devino en comentarios favorables. En ese entonces el país ya cumplía con las 49 recomendaciones formuladas por el GAFI.

El año pasado, cuando desde el Gobierno se anunció una ley para el blanqueo de capitales, se encendieron luces amarillas que finalmente no pasaron a mayores porque el articulo 14 de esa ley señala que las entidades y personas obligadas que accedan al blanqueo igualmente se encuentras sujetas a las regulaciones antilavado.

Las principales objeciones que los enviados argentinos encontraran es la falta de condenas en la Justicia. Todavía las sentencias son mínimas en comparación con otros países que además de sentencias penales, sus tribunales emiten duras multas contra las entidades bancarias que violan las leyes antilavado. El diagnóstico más comentado en el fuero federal es el que señala que los jueces todavía no tienen las herramientas legales para ir tras los lavadores.

Estas perspectivas podrían encontrar una respuesta en el fallo por el cual recientemente el juez Sebastián Casanello procesó a los financistas Federico Elaskar y Leonardo Fariña, que saltaron a la fama por sus incursiones en los shows de TV. En el texto del procesamiento el juez señala en reiteradas ocasiones que uno de sus principales elementos de sospecha es que ninguno de los dos estaba en condiciones de justificar su elevado nivel de vida, a lo cual se sumaban amistades con prontuarios inquietantes. La cumbre que actualmente transcurre en Francia brinda otro escenario para entender el estado de ciertos issues geopolíticos. La crisis de Crimea ha generado distancia entre Estados Unidos y Rusia, que en las últimas semanas se ven replicadas en todos los organismos multilaterales en los que participan ambos países. Actualmente la presidencia del GAFI está en manos del ruso Vladimir Nechaev. El fin de semana anterior Alak estuvo en San Petersburgo y mantuvo un encuentro a solas con el ministro de Justicia de Vladímir Putin, Alexander Konovalov.Citas y conversaciones cuyos resultados podría observarse antes del viernes. Ocurre que, al menos en los últimos encuentros, los representantes de Estados Unidos han sido más duros con la posición argentina al señalar cuestionamientos al funcionamiento de la UIF además de la existencia de "lagunas legales" que dificultan las funciones de los jueces.

La hipótesis de un resultado favorable ganó algunos puntos semanas atrás cuando México logró ser excluido de la llamada lista gris. El Gobierno de ese país también debió aprobar un proyecto solicitado desde el organismo con características similares al proyecto que votó el Congreso argentino.

Una señal de mayor envergadura fue cuando, en enero de 2013, Sbatella firmó un memorando de entendimiento con Jennifer Calvery, en ese entonces titular de la FinCEN, que vendría a ser su equivalente en Estados Unidos. El documento se rubricó en Bélgica, en un foro que agrupa a estos organismos.

El encuentro en París tendrá su momento de mayor relevancia mañana al mediodía cuando se comuniquen las conclusiones finales y el Gobierno sepa hasta qué punto sus gestiones en diversas latitudes tuvieron el efecto esperado. 

Fuente: Ambito