reservas del Central

BCRA pide ayuda a bancos para fortalecer reservas

miércoles, 23 de octubre de 2013

Quiere que tomen financiamiento exterior para prestar a cerealeras y a YPF. También que se libere el crédito local.

Obligado a perder dólares por una corrida cambiaria que no termina, y que lo golpea con un drenaje de reservas que ya llega a los u$s 1.000 millones mensuales, el Central debió salir en estos días a requerir ayuda a los bancos extranjeros y nacionales para fortalecer sus ahorros, de la misma manera que lo hizo la semana pasada con las cerealeras.

El organismo les pide que se endeuden en dólares con bancos corresponsales del exterior y que "calcen" las divisas obtenidas en prefinanciaciones de exportaciones que podrán tomar esas mismas cerealeras o a la petrolera estatal YPF. El mecanismo tendría indefectiblemente un efecto positivo sobre las reservas porque supondría un ingreso de divisas que tarde o temprano terminaría liquidándose en el mercado cambiario oficial; o, en el mejor de los casos, en la suscripción del BAADE, el bono energético que lanzó el secretario de comercio, Guillermo Moreno, y que no termina de despegar. Pero amenazaría la rentabilidad de los bancos porque, frente a una mayor devaluación, podría suponer para ellos colocar esos nuevos préstamos a tasas de interés negativas.

El convencimiento es, dicen, entidad por entidad. Y forma parte de un plan que puso en marcha el Banco Central para defender sus divisas de una corrida que a esta altura parece difícil de disimular. Ayer, desde la mesa de dinero del organismo debieron salir a evitar lo que hubiera sido una fuerte escalada del tipo de cambio: vender u$s 40 millones de divisas al contado en el mercado y una buena cantidad de futuros que vencen en mayo de 2014, como no lo hacían desde hace ya más de un mes, para frenar así la suba del oficial; y colocar, al mismo tiempo, más de $ 100 millones de bonos en dólares contra pesos (Bonar X) para evitar una mayor estampida del informal, que saltó a $ 10,05.

La semana pasada, el Central ya había pedido ayuda a las grandes cerealeras para que volvieran a tomar todo el financiamiento que pudieran en el exterior. Desde el organismo dicen haber recibido en respuesta el compromiso de obtener unos u$s 600 millones antes de fin de mes y unos u$s 2.000 millones antes de fin de año. "Además del tema de recomposición de reservas es importante que no haya una excesiva presión en el mercado de pesos en detrimento del financiamiento a pymes y de las tasas", completó una fuente oficial. El propósito, según dijeron, es doble: lograr que ingresen divisas al país para nutrir de ese modo las reservas del Banco Central, y desplazar a las cerealeras del mercado local de crédito bancario en pesos, en el que este año ganaron más protagonismo, para aliviar la demanda de liquidez y evitar una estampida de las tasas de interés.

Con todo, en los bancos creen que la cifra es demasiado ambiciosa. Y algunas de ellos no parecían ayer seducidos del todo. "No creo que hagamos nada antes de las elecciones. ¿Mirá si devalúan?", comentó ayer a este diario un alto directivo de uno de los grandes bancos del sistema. El sector entero empieza a verse ahora más fortalecido que en el pasado para oponerse a los exóticos pedidos oficiales porque cree, sobre todo, que las grietas que hoy se ven en algunos organismos del poder podrían acentuarse después del domingo. La semana próxima, por ejemplo, terminará la licencia de 60 días que decidió tomarse el presidente la asociación que agrupa a los bancos nacionales (ADEBA), Jorge Brito, tras haber sido señalado en una lista de tuits de la presidente Cristina de Kirchner por sus críticas al modelo. El banquero no tiene la menor intención de extenderla, según pudo confirmar este diario, y su plan es retomar el liderazgo de los bancos nacionales de cara a la reunión de Felaban, la entidad regional que preside, en Miami. Supone que hay motivos para pensar que, la semana próxima, el contexto habrá cambiado en algo. 

Fuente: Ambito