crisis financiera mundial

El Banco de Japón cede a la presión política para aplicar medidas contra la deflación

miércoles, 23 de enero de 2013

El Banco de Japón (BOJ) cedió a la presión política y se comprometió a comprar bonos del gobierno en cantidades ilimitadas en tanto los responsables de la política internacional expresaron nuevos temores sobre la posibilidad de una guerra de divisas mundial.

En un nuevo intento por liberar a la tercera mayor economía mundial de la deflación que la acucia desde hace décadas, el BOJ dijo que apuntaría a una tasa de inflación del 2% superior a su meta del 1% lo antes posible pasando al tipo de estímulo ilimitado ya aplicado por la Reserva Federal de EE.UU. y el Banco Central Europeo.

Los formuladores de políticas en otros lugares valoran las medidas del BOJ, luego de que el primer ministro Shinzo Abe presionara para que el banco central se esforzara más por reactivar el crecimiento, como un intento de devaluar el yen para apoyar las exportaciones japonesas. Abe elogió la decisión del BOJ, dijo que la responsabilidad del banco central de acabar con la deflación había quedado clara y agregó que la medida era un paso hacia una flexibilización monetaria audaz.

Michael Meister, miembro senior de la Angela Merkel´s Christian Democratic Union, quien tiene previsto reunirse con funcionarios de Japón el próximo mes, definió las medidas para limitar las ganancias del yen como muy preocupantes y dijo que Alemania probablemente buscaría el apoyo de otros países del G-20 para instar a Japón a cambiar de rumbo.

¿Qué pueden hacer los competidores de Japón?, dijo Meister. O somos todos inteligentes y no hacemos nada o seguimos el ejemplo y creamos una espiral que nos perjudica a todos.

Mervyn King, gobernador del Banco de Inglaterra, ayer indicó que los funcionarios británicos también estaban preocupados por la posibilidad de una serie de devaluaciones competitivas de las economías líderes.

"Cada vez más países concluyen que sólo una tasa de cambio real menor proporcionará el estímulo a la demanda que sus economías necesitan", dijo.

La medida del BOJ no logró debilitar el yen, que rebotó en los mercados mundiales ante la decepción de los inversores. En las últimas semanas los inversores se agolparon en las operaciones a corto en yenes con la expectativa de que el BOJ tomase medidas enérgicas para combatir la deflación y debilitar el yen.

"Hay decepción en tres frentes", dijo Kit Juckes, estratega de divisas del Société Générale. "La meta de inflación no tiene un límite de tiempo fijo, las compras de bonos siguen apuntando al extremo corto de la curva y no empiezan a tiempo".

Tras el vencimiento de la ronda actual de Y101 trillones de compras de activos en enero de 2014, el BOJ comenzará a comprar Y13 trillones, mayormente de deuda pública a corto plazo cada mes hasta cumplir su nueva meta de inflación.

Masaaki Shirakawa, gobernador del BOJ, describió las medidas como "un avance firme" y dijo que el banco central había "fortalecido la cooperación con el gobierno".

 

Fuente: El Cronista