Detenido por un fraude con tarjetas de débito clonadas

viernes, 15 de abril de 2011

Copiaban datos de las tarjetas y hacían otras mellizas para hacer compras. Hay 5 damnificados por una suma de $50.000.

Un sujeto fue apresado ayer por un supuesto fraude que podría ascender a los 50.000 pesos con compras a través de tarjetas de débito clonadas. En su casa hallaron computadoras y equipos especiales para confeccionar los plásticos mellizos y grabar los datos de sus víctimas en las bandas magnéticas, indicó la policía. Fuentes del caso señalaron que hay al menos 5 personas que fueron víctimas de la maniobra después de ir a comer al mismo restaurante de Santa Lucía.

Los policías de Defraudaciones y Estafas -a cargo del principal Domingo Sombra- allanaron ayer un domicilio de calle Guemes, Capital, donde apresaron a Guillermo Daniel Entz (50), revelaron fuentes del caso. En su casa hallaron un pequeño aparato utilizado para copiar datos de las bandas magnéticas, además decenas de tarjetas en blanco, lectoras de plásticos, computadoras, impresoras y una máquina para plastificar, informaron. También encontraron 10 carnet de conducir "truchos", 11 tarjetas VISA mellizas y hasta algunas falsificaciones de ticket canastas, según indicaron.

Una punta de la investigación se centró en el restaurante de un hotel de Santa Lucía, donde supuestamente alguien copiaba o "robaba" los datos de las tarjetas. Una de las víctimas, el docente Alejandro Dávila, denunció que el 19 de marzo fue a comer a ese lugar y pagó con débito, según la causa. Curiosamente, a los 4 días, vaciaron su cuenta haciendo compras de combustible, ropa, artefactos y hasta mercadería por un total de más 9.000 pesos. En la policía, contaron que hay otros cuatro casos de personas que habrían ido a ese negocio y a las que después le aparecieron operaciones que nunca efectuaron por montos similares. Según explicó la policía ninguna las víctimas se manejaba con PIN para las operaciones y eso facilitaba la maniobra, dijeron.

La hipótesis es que cuando el cliente entregaba su tarjeta, copiaban a escondidas los datos de su banda magnética con un pequeño aparato electrónico. Después bajaban la información a una computadora y de ahí la grababan en un nuevo plástico y a la vez imprimía el logo del banco y los datos del titular. La sospecha es que Entz clonaba las tarjetas, y también realizó algunas de las compras. Habría quedado grabado en unos comercios. En la causa, hay otros sospechosos y hoy detendrían a al menos uno más.

Fuente: El Diario de Cuyo