LOS ACTIVOS EN CARTERA ATADOS AL CER RINDIERON 45% MENOS

Los bancos dejaron de ganar este año $ 2.200 millones por la manipulación del Indec

viernes, 10 de diciembre de 2010

Las entidades públicas sufrieron mayor ajuste: sin la subestimación del índice, sus ingresos se hubieran incrementado un 73%. En las privadas, el beneficio podría haber sido 6% superior

La manipulación de la inflación en los años K terminó provocando un fuerte recorte en los ingresos de los bancos. Y castigó incluso con más dureza a los del sector público. Durante los primeros nueve meses de este año, las entidades del sistema se perdieron de obtener unos $ 2.200 millones por la tenencia de los activos en cartera que ajustan por el índice de precios al consumidor (IPC) oficial. El impacto resultó ser mayor en las entidades estatales, que aportaron el 86% de los ingresos netos por CER en todo el sistema, y que hubieran incrementado un 73% sus ganancias totales de no haber existido intervención en el Indec.

Según reveló en un informe de la consultora AMF Economía, “entre enero y septiembre pasados los balances de las entidades financieras arrojaron beneficios por $ 1.803 millones provenientes de sus activos netos ajustables por CER”. Pero, finalmente, esos valores podrían haber llegado a los $ 4.040 millones con un IPC verdadero. Para el cálculo de un índice de precios cercano a la realidad la consultora considera la medición de la dirección de estadísticas de la provincia de Santa Fe.

“Todo indica que en lo que va del año el CER reflejó sólo el 45% del ajuste que hubiera correspondido en caso de haber sido elaborado con una medición no distorsionada de los precios al consumidor”, comentaron sus analistas.

Los grandes perdedores por la subestimación de la inflación fueron, principalmente, los bancos públicos, que explicaron un 86% de los ingresos netos por CER registrados en todo el sistema durante los primeros nueve meses del año.

Según el estudio, sólo una mínima porción de los ingresos resignados por la inflación subestimada pesó en la rentabilidad de los bancos privados. En éstos, el costo de la manipulación oficial alcanzó los $ 300 millones en lo que va del año. Es decir, que su beneficio podría haber sido un 6% superior. En la banca pública, en cambio, la evolución fue diferente: las entidades se perdieron de obtener algo más de $ 1.900 millones por las distorsiones que transmite el IPC sobre el CER. “Sus ganancias netas del período podrían haber resultado superiores en más del 70% frente a las efectivamente contabilizadas, en caso de haberse contado con una medición realista de los precios al consumidor”, contaron en AMF Economía.

La gran participación que mantuvieron los bonos en los ingresos financieros totales de los bancos, desde 2008 hasta hoy, fue una buena medida de la relevancia que representa para ellos la sola tenencia de estos activos. En el tercer trimestre de este año, las entidades obtuvieron más de $ 1.400 millones por la revalorización de los títulos, concretamente, uno de cada tres pesos de los ingresos financieros “netos” que percibieron durante el período. El resto pudo explicarse por el negocio que mejor hacen las entidades, pero que aparece bastante postergado en los últimos dos años por la incertidumbre local: el otorgamiento de préstamos.

El más favorecido por este efecto entre los bancos privados fue el BBVA Francés, que obtuvo en el trimestre unos $ 505,7 millones por este concepto. Aún así, el peso de los bonos también fue relevante en el Santander, el Patagonia, el Hipotecario y el Macro, que obtuvieron entre $ 160 y $ 250 millones cada uno como resultado neto por títulos públicos y privados.

 

Fuente: El Cronista