BUSCA ELIMINAR MANIOBRAS RIESGOSAS COMO LAS QUE DESATARON LA ÚLTIMA CRISIS

Obama firmó la reforma financiera más ambiciosa de los últimos 80 años

jueves, 22 de julio de 2010

“Los estadounidenses nunca más tendrán que asumir las consecuencias de los errores de Wall Street. No habrá más rescates pagados por los contribuyentes”, dijo

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, promulgó ayer la reforma financiera más ambiciosa de los últimos 80 años en el país, con la que su administración espera erradicar las maniobras más arriesgadas de Wall Street. En lo que se considera su mayor éxito en política interna desde que logró la reforma sanitaria meses atrás, el mandatario estadounidense puso su firma a la ley que había sido aprobada hace menos de una semana en el Senado luego de una larga batalla política.

“Estas reformas representan las protecciones financieras para los consumidores más fuertes de la historia”, sostuvo Obama durante la ceremonia, en la que también estuvo presente su vicepresidente, Joe Biden.

Según se explicó, la reforma pretende aplicar las lecciones aprendidas en la crisis financiera de 2008 que “nació de la falta de responsabilidad de algunos, tanto desde Wall Street como desde Washington”.

Obama explicó que las nuevas protecciones serán aplicadas por un nuevo organismo de control para los consumidores que no tendrá más que una tarea: “proteger a la gente, no a los grandes bancos, no a las entidades crediticias, no a las casas inversoras en el sistema financiero”.“Esto no es bueno sólo para los consumidores. Es bueno para la economía”, subrayó respecto de la ley, que en sus más de 2.000 páginas endurece las normas y el control para las entidades financieras y refuerza el derecho del consumidor.

Las nuevas reformas apuntan a impedir que las compañías financieras se involucren en las prácticas arriesgadas que llevaron a Wall Street cerca del colapso en 2008 y que marcaron el comienzo de la recesión global. La ley prevé la creación de un consejo regular compuesto por diez miembros, que dependerá del Departamento del Tesoro, y que debe advertir los posibles riesgos del sistema.

El gobierno recibirá, además, nuevos poderes para hacerse con el control de instituciones financieras que estén en situación de quiebra. Las autoridades reguladoras tendrán más facultades para escindir en divisiones más pequeñas las grandes instituciones financieras que pongan en peligro el sistema financiero. También se regulará el uso que los bancos hacen de los instrumentos financieros más complejos.

Las entidades que cuenten con reservas de garantía estatal podrán invertir sólo en un abanico muy limitado de fondos de alto riesgo (como hedge funds o fondos de private equity). “Gracias a esta ley, los estadounidenses nunca más tendrán que asumir las consecuencias de los fallos de Wall Street. No habrá más rescates pagados por los contribuyentes”, dijo Obama, que exhortó a las autoridades reguladoras a mantenerse “vigilantes” a partir de ahora. 

Fuente: El Cronista