SU PARTICIPACIÓN CAYÓ DEL 20% EN 2004 AL 13% EL AÑO PASADO

Las tarjetas no bancarias pierden peso en la financiación al consumo

miércoles, 14 de abril de 2010

La financiación al consumo sigue siendo el rubro más dinámico dentro del sistema bancario local. Según el BCRA, los bancos privados se quedan con el 62% de ese mercado. Los públicos tienen el 21%

 A pesar de haber atravesado una situación de crisis internacional sin precedentes entre 2008 y 2009, el financiamiento local destinado al consumo de las familias mantuvo una tendencia creciente durante los últimos años. La gran cantidad de promociones y descuentos ayudó a los bancos a motorizar este negocio, que viene siendo sin dudas el más dinámico de la plaza local. Además, las promociones le permitieron a las entidades financieras ganarle terreno a las tarjetas no bancarias, que antes de 2008 venían avanzando a paso muy firme.

Según el último Boletín de Estabilidad Financiera del Banco Central (BCRA), que incluye datos de la segunda mitad de 2009, el crédito originado desde las empresas de tarjetas de crédito emitidas por empresas no financieras representó alrededor de 13% del financiamiento para consumo de los hogares, mientras que en 2004 era el 20%. Mientras tanto, los bancos privados se llevan el 62% del total y los públicos, el 21%.

“El financiamiento para consumo de las familias originado a partir de tarjetas de crédito otorgadas por las empresas no financieras (es decir, no vinculadas directamente a la actividad bancaria), representa una parte considerable del mercado de consumo”, aseguró el BCRA. Sin embargo, “el sector vino gradualmente perdiendo participación frente al sistema financiero en los últimos períodos”, agregó el organismo.

Los datos del Central muestran que, en la actualidad, operan más de 100 firmas dentro del mercado de las tarjetas “no financieras”. Sin embargo, alrededor del 75% de esa plaza está en manos de sólo 5 intermediarios: Tarjeta Naranja, Tarjeta Cuyana, American Express, Tarjetas Más y Tarjeta Shopping.

“Esta fuente de recursos para las familias viene aumentando su dinamismo en los últimos períodos, en concordancia con la mejora de la actividad de intermediación financiera, reflejándose en disminuciones en las tasas de interés y en los niveles de morosidad”, destacó el informe del BCRA”.

Ahora bien, mientras que en 2004 las empresas no financieras otorgaban cerca del 20% de la financiación al consumo de las familias, ahora apenas otorgan el 13%. Sucede que el sector sintió con más fuerza el azote de la última crisis financiera, y tuvo que reducir la oferta de fondeo a las familias, en gran medida debido a los niveles crecientes de morosidad que estaba experimentando.

Mientras tanto, los bancos lograron sacar provecho de la debilidad de sus competidores, y aumentaron su cartera de clientes a fuerza de promociones, descuentos y otros beneficios. “El rol asumido por los bancos en el otorgamiento de préstamos para consumo de los hogares fue preponderante en los últimos años, dadas sus ventajas en términos de disponibilidad de una amplia red de sucursales en distintos puntos del país y su capacidad para evaluar a los potenciales deudores, entre otros factores”, explicó el BCRA.

Los datos del organismo monetario muestran que a partir de mediados de 2009 comenzó a renovarse el dinamismo del consumo de los hogares, en parte por la menor incertidumbre acerca de los efectos de la volatilidad internacional sobre la actividad económica local. En este marco, el financiamiento para consumo de las familias mejoró, incluso para las empresas no financieras. De hecho, también mejoraron los niveles de morosidad: la irregularidad de las financiaciones mediante tarjetas otorgadas por empresas no financieras se ubicó en torno a 20% al cierre de 2009, casi 2 puntos porcentuales menos que en la primera parte del año, aunque muy encima de los niveles que se manejan en los bancos. El ratio de irregularidad del crédito bancario a las familias se ubica en 4,7%.

Fuente: El Cronista