Bancos vs. Gobierno: se tensa la relación y ya hay 7 conflictos

martes, 13 de septiembre de 2016

Los funcionarios culpan a los banqueros por la lentitud del blanqueo de capitales y las altas tasas de los créditos. Desde el sector, los ejecutivos protestan por medidas inaplicables y plazos incumplibles.

La buena convivencia que habían previsto inicialmente tener los banqueros con el nuevo Gobierno de Cambiemos, más propenso a medidas en favor del libremercado que la gestión anterior, quedó bastante distanciada de la realidad actual. El sector tiene abiertos ya al menos siete grandes conflictos con funcionarios por resistirse a iniciativas que consideran nocivas y riesgosas sobre sus negocios. Del lado oficial, en cambio, tanto el Ministerio de Hacienda y Finanzas como el Banco Central ya hicieron públicos sus reproches a los bancos por la actitud y la falta de respuestas que muestran ante sus iniciativas: desde la reticencia a aceptar sin grandes objeciones las operaciones de blanqueo -como ya lo hizo explícito el secretario de Finanzas, Luis Caputo-, hasta la desidia o la falta de agresividad para salir a competir y ganar mercado con tasas más bajas, como lo expuso en un discurso reciente el presidente del BCRA, Federico Sturzenegger.

1| El blanqueo de capitales

El Gobierno atribuye a los bancos buena parte de la responsabilidad en la lentitud que reflejó en sus comienzos el llamado "sinceramiento fiscal". En primer lugar, porque demoraron en adecuar sus plataformas, informar a clientes e implementar los mecanismos necesarios para ingresar el dinero en negro. Y en segundo lugar, por la enorme cantidad de formularios y trámites que exigen a los potenciales blanqueadores para evitar quedar expuestos a una sanción por lavado de dinero. De un lado, hay clientes que consideran inadmisible que las entidades financieras lleguen a exigirles tres declaraciones juradas para asegurarse que lo blanqueado guarde "razonabilidad" con la situación impositiva. Del otro lado, hay entidades temerosas por la vigilancia oficial: "Si viene un monotributista a blanquear 3 millones de dólares, se lo vamos a exteriorizar. Pero lo más probable es que generemos un reporte de operación sospechosa a la UIF (la Unidad de Información Financiera)", comentaron a este diario desde uno de los grandes bancos del sistema. El obstáculo se da, según dicen, porque la UIF no derogó ni modificó ninguna de sus resoluciones.

2| Baja de comisiones a los comercios

El sector entero quedó en estado de ebullición en estas semanas por el proyecto de ley que avanzó en el Congreso nacional, por "pasividad" o "negligencia" del oficialismo, para modificar la ley de tarjetas que reduce las comisiones que cobran a los comercios en pagos por débito o crédito. Por lo bajo, los bancos amenazaron con interrumpir el plan Ahora 12, que los fuerza a financiar a un año de plazo y al 0% de tasa. La iniciativa ya recibió media sanción en el Senado y podría convertirse en ley en las próximas semanas.

3| Tasas de créditos y depósitos

El presidente del BCRA, Federico Sturzenegger, ya criticó en varias ocasiones a los bancos por "remunerar" muy poco a los ahorristas que guardan su dinero en el sistema y no brindar "crédito accesible" al sector productivo. "Muchachos: mírense para crecer. El financiero es un sector que tiene para expandirse 10 o 20 veces. A la fuente de la materia prima (el ahorro) no la cuidamos, no la protegimos, sino más bien, la espantamos. Sin depósitos no hay recursos para el mercado de crédito", se exasperó el funcionario la última vez, ante un nutrido auditorio de ejecutivos durante una jornada de "marketing bancario" en Puerto Madero. En los bancos creen que la pretensión oficial es insostenible: "Nos impiden cobrar muchas comisiones por servicios o productos y nos fuerzan a dar créditos subsidiados. ¿Qué spread de tasas quieren que tengamos en una economía con inflación del 40% anual?", se exasperaron desde una de las asociaciones.

4| Los préstamos ajustados por UVI

Sturzenegger también se mostró preocupado, en estos días, por la displicencia que muestran de los banqueros para tentar al mercado con los ahorros que ajustan por inflación (UVI), diseñados por técnicos del propio organismo: "El entusiasmo que se ha visto en la colocación de créditos hipotecarios en UVI no se ha visto acompañado con el mismo énfasis en el ofrecimiento, por parte de las entidades financieras, de oportunidades de ahorro en UVI; y es importante entender que uno no podrá existir sin el otro", lanzó.

5| Medios de pago electrónicos

El vicepresidente del Banco Central, Lucas Llach, se mostró activo y movedizo en los últimos meses en el diseño de novedosos medios de pago electrónicos. El objetivo de lanzar estos instrumentos es bajar los costos de transacción, agilizar las operaciones, ampliar la bancarización y formalizar la economía. Los ejemplos más recientes: la billetera electrónica o el botón de pago, que permiten realizan transacciones de manera digital, sin necesidad de utilizar efectivo. En los bancos creen que estos mecanismos muchas veces son difíciles de implementar, por cuestiones tecnológicas o por las estrictas medidas de seguridad que deben respetar; y que los plazos que les impone el BCRA resultan incumplibles (debían ponerlos en marcha y salir a ofrecerlos desde el 1 de agosto).

6| Exceso de efectivo en sucursales

Los bancos reclaman desde hace tiempo por el exceso de billetes que acumulan en sus tesoros porque el Central no se los recibe. "Nos cuesta mantener semejante cantidad de billetes. Es un activo ocioso que hay que fondear con plazo fijo", protestó el gerente financiero de un banco extranjero. La pasividad del Central frente a esta incomodidad tiene un justificativo: el efectivo retenido actúa como una suerte de "encaje bancario", que inmoviliza los pesos de la economía en un momento en que el Central debe administrarlos para mantener la inflación bajo control.

7| Los resúmenes de cuenta, en papel

En febrero, el Banco Central se vio forzado a congelar una norma que permitía a los bancos dejar de enviar resúmenes de cuentas en papel para hacerlo por vía electrónica. Presionado por el gremio de los camioneros, que preside Hugo Moyano (llegó a amenazar con un paro de transportadores de caudales), Sturzenegger terminó por aceptar postergar la medida por un año y ponerla en práctica sólo desde entonces, pero en forma gradual. "Lo mismo que pasó con el sector de los camioneros sucede muchas veces con el nuestro: a veces avanzan en las medidas sin consultar al sector, y sin tomar dimensión de los costos, los efectos y las dificultades que presentan sobre el negocio del sistema", se lamentó un ejecutivo. 

 

Fuente: Ambito