Tensión entre bancos y el Central por comisiones (habrá paliativos)

viernes, 15 de abril de 2016

El diálogo entre el directorio del Central y los grandes bancos empezó a hacerse más tenso en los últimos días, después de una serie de medidas oficiales que se lanzaron para aumentar la transparencia de los precios del sistema financiero y alentar una mayor competencia.

El diálogo entre el directorio del Central y los grandes bancos empezó a hacerse más tenso en los últimos días, después de una serie de medidas oficiales que se lanzaron para aumentar la transparencia de los precios del sistema financiero y alentar una mayor competencia. Los banqueros hicieron saber su malestar a los funcionarios, esta misma semana, luego de que se decidiera publicar en la web y difundir por todos los medios las comisiones que cobran a sus clientes por cajas de ahorro, cuentas corriente y tarjetas de crédito, entre otras cosas.

Los ejecutivos del sector consideran, por ejemplo, que en las tablas se comparan productos diferentes y no se contemplan algunos beneficios adicionales que muchos de ellos incorporan a sus paquetes de productos. Pero a éste le suman, también, una lista de reclamos que acumulan desde hace tiempo por medidas anteriores: en primer lugar, el impedimento para cobrar en sus préstamos el seguro de vida (desde hace poco el BCRA los obliga a reflejar cualquier costo adicional en las tasas de interés); y en segundo lugar, la pasividad del organismo frente al aluvión de billetes que sufren en sus sucursales. El efectivo en pesos, todavía con muy baja denominación y un ritmo de emisión cercana al 30% anual, empezó a desbordar en sus tesoros desde principios de año y los forzó desde entonces a acopiar una buena parte de éste en transportadoras de caudales. La única respuesta que reciben es, hasta ahora, la promesa de que todo empezará a normalizarse una vez que en la economía desembarquen los billetes de $ 200 y $ 500.

Atento a esto, el Central -bajo la conducción de Federico Sturzenegger- tiene previsto lanzar en las próximas semanas una serie de medidas que buscarán flexibilizar las normativas y apuntarán a reducir los costos financieros para ampliar la bancarización. El plan incluye, por ejemplo, facilitar a los clientes la apertura de cuentas y hacer más accesible a las entidades financieras la puesta en funcionamiento de sucursales en zonas poco rentables. Una de las medidas, comentan, podría ser la implementación de un legajo digital que permita a cualquier persona ingresar todos los datos cuando desee abrir una caja de ahorro u obtener una tarjeta de crédito, sin necesidad de acercarse inmediatamente a las oficinas de atención. También considerar los altos costos que hoy pesan sobre los bancos al momento de poner en marcha una nueva sucursal, e introducir cambios en la regulación que les permitan incorporar nuevos medios electrónicos para aliviar los costos que representa la seguridad, el manejo del efectivo y el mantenimiento del personal.

Las normativas están todavía en estudio y no verán la luz probablemente en lo que queda de este mes. Pero son parte de las conversaciones que mantienen diariamente las áreas técnicas del Banco Central, que procuran moderar los reclamos del sector. La semana pasada hubo dos grandes medidas en esta misma dirección: el organismo aplicó una fuerte reducción de los aportes que tiene que hacer obligadamente los bancos al fondo de garantía de los depósitos (el Sedesa), que les dejará disponibles a partir de ahora unos $ 5.400 millones adicionales al año en efectivo; y concedió, además, la posibilidad de no pasar a pérdida en sus balances ("previsionar") las cifras de la mayoría de las multas y sanciones que recibieron de algún organismo del Gobierno por alguna denuncia o infracción, de manera que puedan cumplir con los requisitos de capital para girar dividendos al exterior con mayor facilidad. La convivencia del sistema parece haber empezado a resquebrajarse. Pero, al contrario que en gestiones anteriores, la esperanza del sector está puesta en que, esta vez, hay un canal de diálogo habilitado para resolver las diferencias.

Fuente: Ambito