cepo cambiario

El Banco Central ya multó a las casas de cambio por $12 millones este año

viernes, 05 de abril de 2013

La entidad aplicó estas sanciones a financieras y ejecutivos debido a "irregularidades". Detrás está la batalla contra el dólar marginal y la fuga vía paquetes turísticos

En medio de la batalla contra el dólar que derivó en el cepo cambiario actual, el Banco Central tuvo que salir a usar su poder de policía con varias de las más tradicionales casas de cambio de la city porteña. Éstas, según el Central, infringieron la ley penal cambiaria.

Por eso el BCRA que conduce Mercedes Marcó del Pont sancionó a un grupo de casas de cambio y a sus principales directivos por un monto de casi $12 millones durante el primer trimestre del año.

Las sanciones, explican en Reconquista 266, fueron la conclusión de “sumarios iniciados a raíz de diversas infracciones a las normas cambiarias y de prevención de lavado de dinero”.

Claramente la proliferación del mercado ilegal del dólar y el modo en que algunas casas de cambio operan en las sombras fue el disparador de las multas que aplicó la autoridad monetaria. También muchas de ellas estaban relacionadas con lo que AFIP denominó “fuga de divisas simulada vía paquetes turísticos”.

Según se había consignado, la operatoria consistía en comprar dólares físicos en el mercado oficial y girarlos al exterior bajo el argumento del pago de pasajes, hoteles, excursiones o paquetes. Muchas operaciones involucraban reservas, o sea, pagos anticipados, que en algunos casos habrían sido cancelados y no reembolsadas esas divisas.

Entre enero y marzo, el BCRA fijó multas por un total de $3.112.500 a casas de cambio sumariadas y por un monto global de $8.616.000 a sus principales directivos.

 Las entidades sancionadas en el período mencionado fueron Alhec Tours S.A., Argecam S.R.L., Cambios Norte S.A., Cambio Santiago S.A., Giovinazzo S.A., Libres Cambio S.A., Maxinta S.A., Tourfe S.A. y Sudamérica S.R.L., según destacan en el Central.

No es un dato menor que tanto Alhec como Maxinta hayan sido sancionados. Sucede que sus máximos ejecutivos son los más altos representantes de la Cámara de Casas de Cambio. Fernán Peralta Ramos es el presidente de la Cámara (dueño de Maxinta) y Carlos Rivera actúa como vicepresidente (titular de Alhec).

Entre las infracciones detectadas figuran la falta de cumplimiento de un régimen informativo dispuesto por el BCRA para el sector, así como deficiencias en la confección de los boletos cambiarios que acompañan cada operación.

Entre otras irregularidades, también se encontró la existencia de legajos incompletos de los clientes, lo cual contradice las normas locales e internacionales que obligan a la entidad a conocer a sus clientes para prevenir eventuales situaciones de lavado de dinero.

La semana pasada el Banco Central había establecido sanciones de multas e inhabilitación a la casa de cambio París Cambio y a sus principales directivos. En ese momento impuso una multa a la firma por $610.000, que se suma una similar aplicada a su titular, Carlos Alberto Reynier, a quien además se lo inhabilitó por dos años.

También se multó al vicepresidente de París Cambio, Jorge Santiago Ramos, en $450.000, y se lo inhabilitó por un año; mientras que sobre el gerente de sucursal, Marcelo Gustavo Suárez, recayó una multa de 298.000 pesos.

“Estas penalidades reflejan una profundización de la política de control que lleva adelante el Banco Central para garantizar el cumplimiento de la normativa cambiaria y de prevención de lavado de activos”, dicen desde la entidad rectora.

Otro dato tampoco menor es que para poder apelar la sanción del Central, tanto la casa de cambio o el ejecutivo involucrado tienen que pagar la multa primero. Se busca en todos los casos desalentar la operatoria del dólar blue y la fuga de divisas vía los paquetes turísticos que ahora cuentan con el impuesto del 20% a cuenta de Ganancias.

Se descuenta que el Central continuará controlando a las casas de cambio y se cree, en realidad, que esta es sólo la primera etapa del "adoctrinamiento" que se desea. Todo sea por mantener los tan necesitados dólares. 

Fuente: Infobae