Crisis financiera

Bancos centrales actúan mientras crisis zona euro ruge

jueves, 01 de diciembre de 2011

Los principales bancos centrales del mundo actuaron conjuntamente el miércoles para proveer liquidez en dólares a los aproblemados bancos europeos, mientras la crisis de deuda de la zona euro amenaza con generar un desastre financiero

El sorpresivo movimiento de la Reserva Federal de Estados Unidos, el Banco Central Europeo, el Banco de Japón y los bancos centrales de Gran Bretaña, Canadá y Suiza recordó a una acción coordinada para estabilizar a los mercados globales lanzada en la crisis financiera del 2008.
El euro y las acciones europeas subieron por la noticia, que se produjo después de que los ministros de Finanzas de la zona euro acordaron elevar el poder de fuego de su fondo de rescate, pero reconocieron que podrían tener que recurrir al Fondo Monetario Internacional por más ayuda.
En una acción relacionada, el banco central italiano inició licitaciones de emergencia en efectivo para los bancos que han sido afectados particularmente fuerte en las últimas semanas por el alza de los costos de endeudamiento de Roma hacia el 8 por ciento, un nivel visto como insostenible en el largo plazo.
"Estamos entrando al periodo crítico de 10 días para completar y concluir la respuesta de la Unión Europea a la crisis", dijo el miércoles el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios de la UE, Olli Rehn, tras un encuentro de los ministros de Finanzas europeos.
Tras dos años de crisis de deuda soberana de Europa, los inversionistas están escapando del mercado de bonos de la zona euro, los bancos europeos están saliendo de la deuda soberana y los bancos del sur de Europa están perdiendo depósitos, generando dudas sobre la supervivencia de la moneda única.
Los líderes de la zona euro han acordado una medida tras otra, pero no han logrado restaurar la confianza y ahora enfrentan un crítico momento en la cumbre del 9 de diciembre en Bruselas, vista por algunos analistas como un momento de todo o nada para el euro.
Los ministros acordaron en la noche del martes planes detallados para apalancar el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), pero no se pudo decir el monto debido al rápido empeoramiento de las condiciones del mercado, que los llevó a mirar al FMI.
"Estamos observando una verdadera crisis financiera, que es un trastorno generalizado de los mercados financieros", dijo Christian Noyer, gobernador del Banco de Francia y miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo, en una conferencia en Singapur.
Los rendimientos de los bonos españoles e italianos retomaron el miércoles su inexorable alza hasta niveles insostenibles, dado que los mercados evaluaron el fondo de rescate como inadecuado.
"Debe recordarse también que el FEEF ya está financiándose en un nivel muy amplio por Alemania, que tuvo problemas en su última subasta de deuda para captar los fondos requeridos y podría tener su calificación bajo severa presión ante cualquier rebaja de la nota de Francia", dijeron estrategas de Rabobank en un informe.

¿FMI A LA ALTURA?

El Eurogrupo de 17 países adoptó planes detallados para asegurar el primer 20-30 por ciento de nuevas emisiones de bonos para los países que tengan dificultades de financiamiento. Además, acordó crear fondos de co-inversión para atraer inversionistas extranjeros hacia los bonos de gobiernos de la zona euro.
Ambos esquemas estarían operativos en enero, con cerca de 250.000 millones de euros del fondo de rescate FEEF disponibles para apalancar, después de haber financiado un segundo programa de rescate para Grecia, dijo el presidente del Eurogrupo Jean-Claude Juncker.
El objetivo es que el FMI se ponga a la altura y apoye el reforzamiento del FEEF, dijo Juncker en rueda de prensa.
Pero con China y otros fondos soberanos grandes cautelosos sobre invertir más en deuda de la zona euro, el jefe del FEEF, Klaus Regling, dijo que no esperaba que los inversionistas comprometieran montos mayores para las opciones de apalancamiento en los próximos días o semanas, y no pudo cifrar el tamaño final del fondo apalancado.
"Realmente es imposible dar un número para el apalancamiento debido a que es un proceso. No anunciaremos cientos de miles de millones de dólares el próximo mes, necesitaremos dinero mientras seguimos adelante", dijo Regling.

MEDIDAS RADICALES

La mayoría de los analistas coinciden en que solo aplicando medidas más radicales tales como una masiva intervención del BCE para adquirir bonos soberanos directa o indirectamente se podría hacer algo contra la crisis.
Las perspectivas de convencer al FMI de que entre a apoyar más claramente a la zona euro son inciertas. Varias economías grandes son escépticas de los llamados europeos por más recursos para el prestamista global.
Estados Unidos, Japón y otros estados asiáticos son reacios a poner más dinero a menos que Europa se comprometa, primeramente, a usar sus propios recursos para resolver el problema y que los estados de la periferia de la zona euro planeen medidas más concretas sobre reformas fiscales y económicas.
"Nadie quiere gastar dinero en algo que duda que funcione", dijo un funcionario del G-20.
"Eso no solo se aplica a Europa sino para cualquier país de fuera de Europa. La vara para pedir ayuda al FMI es bastante alta. Aquellos que pidan ayuda necesitan estar dispuestos a ceder algo de su jurisdicción sobre política fiscal y dispuestos a asumir reformas dolorosas. Ya no más meras promesas o discursos", agregó.
El nuevo primer ministro italiano, Mario Monti, dijo que recibió una muy positiva reacción de los ministros de la zona euro para sus planes fiscales, aunque recibió como respuesta que tiene que tomar medidas adicionales para reducir el déficit, más allá del plan de austeridad ya adoptado para cumplir con su promesa de balance presupuestario en el 2013.
Monti reveló que se reunió con el jefe del departamento europeo del FMI el miércoles, pero dijo que Italia no considera tomar ayuda del prestamista global.
Reuters informó el martes que Italia y funcionarios del FMI han mantenido discusiones preliminares sobre ciertas forma de apoyo financiero para Roma, aunque no se ha tomado ninguna decisión, según fuentes familiarizadas con las conversaciones.
Los rendimientos de los bonos italianos se situaban por sobre los niveles en que Grecia, Irlanda y Portugal fueron obligados a pedir rescates a la UE y al FMI, y Roma tiene una gran emisión prevista para fines de enero para cubrir vencimientos de deuda.
 

Fuente: Terra