LA PRESENCIA EN FUTUROS DE DÓLAR, POR EJEMPLO, ES APENAS UN 20% DE LO QUE ERA EN LA GESTIÓN REDRADO

El Banco Central opera cada vez menos y desaparece del mercado en la era Marcó del Pont

lunes, 24 de enero de 2011

La poca actividad de la mesa de dinero se debe en parte a la ausencia de escenarios de stress pero también al poco expertise financiero de la cúpula actual del BCRA, aseguran.

La presencia del Banco Central en el mercado financiero es cada vez menor. Desde que comenzó la era Marcó del Pont en la institución, la mesa de dinero ?comandada por Juan Basco dejó de ostentar el protagonismo que solía tener.

La poca actividad del Central se manifiesta en las operaciones de dólar futuro y en el mercado de bonos. Actualmente, la entidad sólo interviene en el mercado spot comprando parte del exceso de dólares para que el tipo de cambio no caiga. La virtual parálisis del Central, cuentan fuentes bien informadas, tiene que ver con dos hechos: que no hay escenarios de stress financiero para justificar intervenciones en los mercados y que la cúpula actual del BCRA tiene poco expertise en el términos financieros.

Cuentan en los pasillos oficiales un dato que pinta de cuerpo entero la situación. La posición del Banco Central en el mercado de dólar futuro, estrategia para poner un piso y un techo a las especulaciones sobre el valor de la divisa a largo plazo, no llega a u$s 2.000 millones cuando el promedio en la era Redrado superaba holgadamente los u$s 5.000 millones.

En las épocas de crisis, el BCRA llegó a tener una posición que superaba los u$s 8.000 millones en futuros (sumando las posturas por ventas y compras de billetes verdes). Entonces, la presencia del Central en futuros es actualmente el 20% de lo que era.

Algo similar ocurre en el mercado de títulos públicos. Con los bonos, son operaciones de mercado abierto que se realizan de acuerdo al nivel de liquidez que se busque. Se compran bonos si querés inyectar dinero en el mercado y vendés si querés quitar liquidez. Pero hoy por hoy el trading que se hace es cero, no se mueve la cartera, relataban fuentes que a su vez confirman que esa tarea recayó ahora en la ANSeS, que maneja Diego Bossio.

Más allá de la menor actividad del Central por cuestiones de coyuntura, afirman voces allegadas, hay un componente importante en la misma estructura actual del Banco Central. No son ningún secreto las diferencias entre Marcó del Pont y el jefe de la mesa de operaciones del Central, Juan Basco. En los pasillos del Central llaman a este hecho la pelea por la botonera.

Sucede que Basco, un hombre de carrera en la entidad que fue jerarquizado por Martín Redrado, se habría negado a que Marcó del Pont interviniera más allá de sus facultades. De hecho la presidenta del BCRA quiso desplazarlo en junio del año pasado, cuando fue a una reunión de directorio con la idea de plantear el despido de Basco.

Éste, que goza de buena reputación por parte de todo el directorio (kirchneristas y no kirchneristas), se mantuvo cuando los funcionarios le negaron la propuesta a Marcó del Pont.

Es difícil ahora hacer algo en el Central cuando tenés el directorio partido en dos y cuando no hay una estrategia clara, hay mucha improvisación. Incluso desde las altas cúpulas no hay un conocimiento de cómo actuar en los mercados, vienen de otras ramas pero no tienen experiencia en lo financiero, afirman diversas fuentes.

No son frecuentes, como en la época de Redrado, las reuniones entre el titular del Central y los banqueros. Ahora son esporádicas y la relación con los ejecutivos del mercado son prácticamente nulas. No sólo la mesa del Central sino que Redrado empujaba para hacer cosas todos los días. Hoy nadie quiere hacer olas, y las operaciones financieras son puntuales y no mucho más, relatan.
 

Fuente: El Cronista