La traba pasa por la postura de Alemania

Para el BCE, la ampliación de utilidades del fondo de rescate "tiene que ser decidido a nivel político"

lunes, 24 de enero de 2011

Las propuestas para alivianar los problemas que afecta a la Eurozona por los estallidos de las deudas públicas de algunos países miembros siguen siendo eje de debate en el Viejo Continente.

El incremento de dinero del programa Facilidad Europea para la Estabilidad Financiera (EFSF) y la ampliación de su utilización genera controversia en el mismo seno de la UE . Mientras autoridades del bloque común están decididos a aumentar el fondo y comprar bonos de deuda por medio de ese mecanismo para dar tranquilidad a los mercados, Alemania se mostró reiteradas veces en contra. Pero un alto directivo del Banco Central Europeo, Juergen Stark, insiste que con el dinero del plan de salvataje se podría recapitalizar bancos y comprar bonos de deuda.

El economista alemán se distanció de la postura del gobierno de Angela Merkel y señaló que "puedo imaginar a la EFSF recapitalizando bancos o comprando deuda soberana", dijo Stark al diario holandés Het Financieele Dagblad. Aunque, diplomáticamente, consideró que "este tema tiene que ser decidido a nivel político".

El Banco Central Europeo (BCE) ha comprado bonos de gobierno en el mercado secundario desde mayo y hasta el momento ha gastado 76.500 millones de euros bajo el programa -cifras que Stark dijo son pequeñas en comparación a lo que otros grandes bancos centrales han gastado en programas de compras de activos. Stark también dijo que el aumento en la capacidad del fondo de rescate, que ha sido solicitada por el presidente del BCE Jean-Claude Trichet, sería para hacer completamente disponibles los 440.000 millones de euros. La otra opción presentada por Stark, recapitalizar bancos, ayudaría al BCE a poner fin a sus medidas de liquidez adicional.

Los bancos de los países con problemas de deuda de la zona euro siguen aislados de los mercados de préstamos y se han vuelto dependientes de financiamiento del BCE, interfiriendo con el retiro de las medidas para luchar contra la crisis. Trichet dijo la semana pasada que el tema era complejo y que el BCE está examinándolo en una base permanente, pero no mencionó las opciones que el banco central estaba estudiando. Stark también dijo al diario que los bonos conjuntos de la zona euro no eran una mala idea -ellos difuminarían las responsabilidades de las finanzas públicas-, pero no lograrían resolver los problemas económicos. Finalmente, él dijo que la actual crisis no era una crisis del euro, que sigue siendo una divisa estable.

Europa está discutiendo maneras de fortalecer la Facilidad Europea para la Estabilidad Financiera (EFSF por su sigla en inglés), que tiene un valor de 440.000 millones de euros (595.000 millones de dólares) pero una capacidad efectiva de préstamo estimada en sólo 225.000 millones de euros debido a la necesidad de conseguir un índice de crédito triple A.

 

 

Fuente: Ambito