PROMOVERÁN USO DE MEDIOS ELECTRÓNICOS EN HOTELES, RESTORANES Y ESTACIONES DE SERVICIO. APUNTAN A UN BLANQUEO

BCRA y la AFIP se unen por otro plan de bancarización

lunes, 17 de enero de 2011

Luego del traspié generado por la falta de billetes en cajeros automáticos, la cúpula del BCRA procura retomar la iniciativa. Ahora los técnicos de la institución están embarcados junto a funcionarios de la AFIP en la segunda etapa del plan de bancarización.

Pero ya no se trata sólo de incentivar el uso de tarjetas o de cuentas bancarias entre los individuos, sino de promover el uso de medios electrónicos de pago entre los establecimientos comerciales.

Ya hubo una serie de reuniones preliminares con representantes de distintas cámaras, entre ellas las de turismo, gastronómicos y estaciones de servicio con el fin de establecer incentivos para que se generalice el uso de tarjetas de débito y crédito, como también de transferencias bancarias.

No se trata de una tarea sencilla, ya que el uso del «cash» sigue siendo muy extendido. Esto no se nota tanto en la región metropolitana como en el resto del país. «En el interior la norma es usar efectivo y es difícil encontrar negocios medianos o chicos que acepten tarjeta. Eso es lo que se busca corregir en esta etapa», reconocieron desde el BCRA. La intención es realizar anuncios conjuntos entre los organismos públicos y las cámaras empresariales donde se anuncien las medidas destinadas a promover el uso de medios electrónicos.

Obviamente que el afán por extender el uso de la tarjeta y otros medios electrónicos no es exclusivamente por bancarizar y por disminuir el uso del efectivo ante la falta de billetes. Detrás también está la intención de la AFIP por buscar aquellos bolsones en donde está generalizado el pago en efectivo, ya que es donde más se produce la evasión. Si se paga «cash» no quedan rastros de la operación, en particular si el comercio luego no entrega la factura. En cambio, cuando la transacción se realiza vía tarjeta necesariamente quedan asentados la venta y los impuestos correspondientes a la misma.

La AFIP puso más la lupa en los últimos tiempos en controlar posibles casos de evasión en grandes empresas, como sucedió en su momento con las cerealeras, y también las advertencias por la falta de pago del Impuesto a las Ganancias por parte de las automotrices. Sin embargo, pasó a un segundo plano la tarea de fiscalización de los pequeños comercios, algo que hace algunos años había sido el caballito de batalla de la institución (recuérdese, por ejemplo, la figura del agente encubierto para fiscalizar la entrega de facturas). El Central emitió normas hace dos semanas para promover la instalación de sucursales bancarias en el interior. Se premiará a aquellas entidades que se vuelquen a captar más clientes en zonas con escasa presencia bancaria. En la medida que en las provincias se generalice el uso de tarjetas, es mucho más probable que los comercios terminen aceptándolas en vez de privilegiar el efectivo.

Claro que las empresas que cobran mucho efectivo se encontraron desde noviembre con un negocio adicional: la venta del «cash», por el que pueden obtener una comisión de hasta el 4% o el 5%. Lo pagan con cheques aquellas empresas que tuvieron dificultades en acceder a billetes porque los bancos los guardaron para abastecer a los cajeros automáticos (igual estas medidas resultaron insuficientes).

Tras la remoción del subgerente general de Medios de Pago, Fabián Arregui, adelantada el viernes por el este diario, en el BCRA esperan dar una vuelta de página confiando en que la llegada de los billetes de $ 100 de Brasil y la propia estacionalidad pasarán a un segundo plano estos problemas. Claro que la entidad debe ponerse a trabajar ya pensando en junio, cuando vuelve a crecer la demanda de billetes por el pago del medio aguinaldo a los trabajadores y a los jubilados.

Obviamente, uno de los grandes aliados para impulsar esta nueva etapa de bancarización a través de la mayor aceptación de medios de pago electrónicos son los bancos. De hecho, técnicos de las distintas cámaras ya estuvieron trabajando con la AFIP y el BCRA para analizar de qué manera se desalienta el uso del efectivo. ADEBA, la cámara que agrupa a las entidades de capital nacional, fue la que más énfasis puso en promover, por ejemplo, el uso de los cheques de pago diferido o de las transferencias bancarias para desalentar el delito de salideras bancarias. 

Fuente: Ambito