Política monetaria

Dólar: la fuga no se frena

lunes, 15 de noviembre de 2010

En el tercer trimestre de este año se fueron 2.487 millones de dólares, acumulando en los primeros 9 meses una salida de US$9.170 millones, equivalente al 61,1% del saldo comercial

Aunque por la crisis global y la depreciación del dólar los capitales "vuelan" hacia los mercados emergentes, y una pequeña porción viene a la Argentina, la fuga de capitales no se detiene y las filiales extranjeras giran más utilidades a sus casas matrices. Según el Banco Central, en el tercer trimestre de este año salieron US$2.487 millones, acumulando en los primeros 9 meses una fuga de US$9.170 millones, equivalente al 61,1% del saldo comercial, en tanto el giro neto de utilidades sumó casi US$3.300 millones.

Con excepción de 2005, la fuga de capitales es una constante. Desde 2002, más de la mitad --55,2% -- de los dólares que ingresaron gracias al superávit comercial salieron del sistema doméstico y se refugiaron en cajas de seguridad, bajo el colchón o fueron al exterior.

En total se fueron casi US$71.000 millones. Además, por el pago de intereses, dividendos y utilidades se giraron otros US$30.000 millones. Así, tan solo una mínima parte del saldo positivo del comercio exterior de todos esos años se sumaron a las reservas del BCRA.

Maximiliano Castillo Carrillo, de la consultora ACM, reconoce que "los flujos de capitales hacia los mercados emergentes se potenciaron, principalmente, luego del discurso del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, cuando quedó en claro que estaba dispuesto a dar un estímulo monetario adicional a la economía de EE.UU., lo que también confirmó que el mundo se adentraba en un período más prolongado de tasas bajas a nivel internacional. Esto potenció el apetito por riesgo de los inversores a nivel global, y en particular en la Argentina, dado el esquema de tipo de cambio cuasi fijo con el dólar, lo que permite que elevados rendimientos en pesos se traduzcan en altos rendimientos en dólares".

Sin embargo, "más allá de este contexto, lo cierto es que la Argentina todavía presenta una serie de incertidumbres, que justifican que nuestro país no se constituya como un destino primario de inversiones externas", dice Castillo Carrillo, quien agrega que "de cualquier manera, los últimos datos muestran una desaceleración hacia fin del trimestre, tendencia que podría ampliarse en el último trimestre del año, incluso mostrando un ingreso neto". También "el mayor apetito por activos locales" se reflejaría "en la cuenta préstamos financieros del sector privado no financiero que arrojó un superávit de US$521 millones fruto del incremento en los desembolsos a mediano y largo plazo, cuando en los últimos trimestres esta cuenta no mostró ingresos".

Justamente uno de los puntos que destaca el Banco Central es que los dólares que ingresaron en el tercer trimestre de este año provinieron "básicamente del sostenido superávit por transferencias por mercancías y, en menor medida, por los ingresos netos de préstamos financieros, destacándose las nuevas colocaciones de títulos de deuda en los mercados internacionales tanto de gobiernos locales como de empresas del sector privado, en un contexto de disminución de las primas de riesgo que afronta la economía doméstica".

La mayor salida de capitales US$37.000 millones-- tuvo lugar en 2008 y 2009 en coincidencia con el impacto de la crisis global que inicialmente contrajo la actividad económica doméstica y una sucesión de crisis internas, el conflicto con el campo, la eliminación de las AFJP o la salida de Martín Redrado del Banco Central.

En los 9 meses de este año el panorama luce más controlado por un conjunto de factores: Los ingresos por exportaciones superaron los pagos de importaciones en US$15.000 millones, mejorando en un 30% el saldo comercial.

La demanda por los pagos por intereses y el giro de utilidades y dividendos sumaron US$5.800 millones. Así el resultado de la cuenta corriente fue de casi US$10.000 millones, superando en 9 meses lo alcanzado en todo 2009.

Los giros netos por intereses de la deuda pública o privada sumaron US$2.600 millones.

Los giros por utilidades y dividendos totalizaron casi US$3.300 millones, unos US$1.400 millones más que igual periodo del año pasado. Este dato muestra que las filiales extranjeras no priorizan la reinversión de esas utilidades en el exterior, mientras la inversión directa extranjera sigue siendo muy reducida.

Las reservas aumentaron en US$3.000 millones, totalizando US$51.125 millones al cierre del tercer trimestre de 2010, unos US$5.800 millones más que septiembre de 2009. 

Fuente: iEco Clarin