Finanzas

Crece la alerta a pocas horas de conocerse la lista de bancos europeos en problemas

viernes, 23 de julio de 2010

Este viernes se conocerán los resultados de las pruebas a que fueron sometidas 91 entidades financieras del viejo mundo. Pero seguramente la difusión de los datos sólo será el inicio de una nueva polémica. Un estudio de un banco estadounidense arrojó cuáles son los más endebles.

Llegó la hora de la verdad para la banca. Este viernes se harán públicos los resultados de los “stress test”, un examen detallado en el que las instituciones financieras europeas medirán su fortaleza en tres escenarios distintos.


Con la publicación, las autoridades del Comité Europeo de Supervisores Bancarios (CEBS) pretenden tranquilizar a los mercados y relajar las presiones que desencadenó la crisis griega y que puso al sistema financiero en el punto de mira de analistas e inversores.

Pero para muchos, sólo será el principio de una discusión más profunda. 

"Creemos que las pruebas de stress sobre los bancos europeos pueden tener un efecto positivo sobre los mercados de crédito. Sin embargo, en nuestra opinión, existen incertidumbres significativas y algunos inversores pueden tratar de protegerse ante un resultado decepcionante con coberturas", explica en un informe el banco de inversión Barclays Capital.

Según el economista Luis Palma Cané, “se han creado enormes expectativas sobre la difusión individual de los tests”.

"Es un elevado riesgo: en términos sistémicos, si la mayoría da mal, lo cual no creo, el impacto sobre la leve recuperación que se vislumbra en el Viejo Continente sería terrible”, agregó Palma Cané.

“Asimismo, se corre el riesgo de que los bancos que den peor sufran serias consecuencias, como fuertes corridas, con todo lo que ello significaría”, manifestó el economista.

Para Palma Cané, “no se tiene claro que los test sólo implican análisis de sensibilidad ante hipótesis negativas y no proyecciones de resultados futuros. Como son arbitrarias, sólo sirven para el regulador y no para el mercado y, menos aún, para uno que está supersensibilizado”

El propio Bank of England manifestó sus temores por lo que pueda ocurrir una vez conocidos los resultados.

"Es posible que las pruebas de stress de la resistencia del sector bancario de la UE, que se publicarán el 23 de julio, contribuirían a mejorar la confianza de los mercados financieros, pero sigue habiendo un considerable grado de inseguridad”, destacó la autoridad monetaria inglesa.

¿Qué informarán los bancos?
Según publicó la agencia Bloomberg, las entidades ofrecerán previsiones de solvencia y ratios TIER 1 tomando como referencia el próximo ejercicio.

Este ratio mide la relación entre el capital social de un banco y sus activos ponderados por riesgo. Así, cuanto más alto sea más solvente será la entidad.

De acuerdos a Basilea, debe situarse en torno al 4%. Sin embargo, la crisis de confianza hace que muchas entidades apuesten por elevarlo hasta el 10 o 12% y desde el propio Banco de España sitúan el mínimo en el 7,5 por ciento.

Pero también deberán medir fuerzas con otros dos escenarios más adversos, de los cuales el peor mostrará su resistencia a un entorno de ‘shock soberano’, pero no asume el default de ninguna nación europea, según explicaron las fuentes consultadas por la agencia de noticias.

En el peor escenario los bancos tendrán que publicar sus pérdidas estimadas basándose en la deuda soberana que tienen en cartera y en otras adicionales que pueden provocar en caso de crisis fiscal.

Los resultados también incluirán cuánto dinero necesitarían recaudar si su ratio cayera por debajo del 6%, en caso de producirse esa crisis de deuda.

Para Gabriel Holand, CEO de HR Global, “el alcance del stress test ´a la europea´ contempló determinar esencialmente, según trascendidos, qué bancos de la UE estarían en condiciones de absorber pérdidas por quebrantos de deudas soberanas".
A tal fin se asumió la incobrabilidad del 17% de la deuda del gobierno griego, 3% del estado español y 0% por parte de la nación alemana.

“En estos supuestos podría aparecer el primer foco de inconsistencias con la realidad, ya que los analistas independientes prevén pérdidas mas elevadas que las estimadas por el CEBS”, apuntó el CEO de HR Global.

“En todo caso, la escasa transparencia y corto alcance del análisis del organismo, al menos por lo que se conoce hasta ahora, poco ayudará a reforzar la credibilidad de los bancos de la eurozona”, expresó Holand.

El test incluye a 91 entidades financieras y pese a que no se esperan sorpresas negativas es probable que algunos bancos saquen más partido que otros con la publicación de las pruebas.

De ese total, 27 corresponden a España, seguidos por los de Alemania, que suman 14, y los Grecia, que son seis. Asimismo, también se publicarán las pruebas de cinco entidades italianas, y cuatro de Francia, Gran Bretaña, Portugal, Holanda y Suecia.

Resurge la antinomia Norte vs. Sur
Los analistas del Banco Nomura diferencian claramente entre las entidades del Norte y Sur de Europa.

Un punto que separa las aguas pasa por las expectativas de crecimiento del PBI. Así, las economías del Norte serán las que más crecerán. Sólo Italia romperá una tendencia donde España mostrará claros síntomas de estancamiento, y Grecia de profunda recesión.

En términos de inversiones, los expertos llegan a la conclusión de que lo más recomendable es mantener posiciones largas o compradoras en los bancos del Norte de Europa ya que, a su juicio, están más sanos que los del Sur, en los que se encuentra la banca española, la griega y la portuguesa.

En este sentido, el banco japonés recomienda entidades de Noruega, Suecia, Reino Unido, Alemania, Francia y Suiza, entre los que destacan DnBNOR, Swedbank, Lloyds, BNP Paribas, Société Générale y Credit Suisse.

Resalta que al igual que lo que sucedió en Estados Unidos, las entidades europeas han protagonizado un “rally” alcista antes de la publicación de los test de resistencia.

Además, si las pruebas ofrecen soportes suficientes para respaldar este “rally”, recomienda a Banco Santander entre los del Sur de Europa, al igual que a entidades francesas, como el BNP.

UBS también hizo su análisis sobre el resultado de las pruebas de estrés, de las cuales los bancos de los PIIG no salen muy bien parados.

Los analistas del banco suizo ven "espacio para la decepción en el mercado de la renta fija en cualquiera de los escenarios", tanto si la banca necesitara un escaso nivel de capitalización como si requiere de una importante inyección.

Aunque asegura que la quiebra está totalmente descartada, sostiene que "los bancos son incapaces de proveer de préstamos, por lo que el actual colapso del crédito continuará durante años".

La calificadora Fitch afirmó que "si las condiciones de financiación en los mercados europeos continúan siendo difíciles podría incrementarse la presión sobre las notas de algunas entidades después de que se den a conocer los resultados de las pruebas de stress realizadas a la banca".

Asimismo, considera que las condiciones de financiación para los bancos son más importantes que la posibilidad de que algunas entidades necesiten inyecciones de capital para reforzar su solvencia a raíz de los test de esfuerzo.

"La publicación de los resultados remediará en gran medida la falta de información que se cuenta hasta ahora", estimó la calificadora.

JP Morgan, en tanto, estimó recientemente que un importante grupo de entidades necesitarán capital para superar las pruebas.

¿Qué bancos no superarían la prueba?
Según las estimaciones de JP Morgan, sería un total de quince instituciones de diferentes países. De los españoles, sólo dos entidades necesitarían ampliar capital para alcanzar el 6% de “core capital” o ratio principal de solvencia antes de 2011.

 



Los más afectados serían el Banco Pastor, que tendría necesidades de capital de 266 millones de euros y el Bankinter, que debería captar 69 millones de euros para llegar a ese nivel.

Los datos se corresponden con la estimación publicada por Financial Times a principios de julio, en la que advertía que el número se extendería a 20 instituciones. Vea la nota: "Advierten que 20 bancos europeos necesitarán ampliar capital"

Entre ellos se encuentra el Popular de España, aunque los banqueros consultados por ese medio mencionan a las entidades italianas Monte dei Paschi y Banca Popolare di Milano y al sector bancario de Grecia, Portugal e Irlanda como los candidatos más probables que tendrán que recurrir a esa ampliación de capital.

Además de los tres bancos españoles, la lista incluye a igual número de entidades italianas y alemanas, dos de origen austríaco e irlandés y uno de Portugal y Grecia.

 



Las valoraciones más altas recaerían en entidades como Santander, BNP Paribas, BBVA o HSBC.

El banco de inversión estadounidense asegura que, en general, los grandes bancos europeos pasarán sin problemas las pruebas, por lo que los resultados de los test serán menos negativos de lo esperado.

La situación de la banca francesa y británica
Los analistas de Nomura creen que la banca de ambos países enfrentará en 2011 graves problemas de financiación, mientras que la ministra de Economía francesa asegura que tiene "total confianza" en el sector de su país.

Los bancos del Reino Unido se verán obligados a captar nueva deuda por un total de 390.000 millones de libras (464.000 millones de euros) o más de 30.000 millones (35.700 millones de euros) al mes.

De ese total, casi la mitad corresponde a títulos de la deuda que vencen y a hipotecas que requieren refinanciación.

Según el Banco de Inglaterra, de aquí a finales de 2012 la deuda a refinanciar oscila entre los 750.000 y 800.000 millones de libras (892.500 y 952.000 millones de euros).

Obtener esos nuevos fondos será mucho más difícil en la actual situación, que aunque ha mejorado con respecto a los meses que siguieron inmediatamente a la crisis financiera de finales de 2008, está todavía muy lejos del crédito fácil del pasado.

Las entidades inglesas se enfrentarán a exigencias de refinanciación muy significativas durante los próximos años, en la medida que vaya venciendo la deuda contraída antes de la crisis crediticia", advirtió Robert Law, del mismo banco.

"Lloyds y RBS tendrán que acometer importantes reestructuraciones de sus balances", afirmó Law.

Ante este panorama por demás incierto, Palma Cané concluyó diciendo que “un stress test sirve para el regulador. Así por ejemplo, el BCRA hace hipótesis de sensibilidad, pero sólo para su análisis”.

“Sería difícil imaginar qué sucedería si se publicaran los resultados en nuestro país. Las pruebas no son para el mercado y menos si está tan sensibilizado como el europeo”, concluyó Palma Cané.
 

Fuente: iProfesional