política monetaria

Ahora faltan los pesos: se modera la emisión y suben las tasas

jueves, 07 de noviembre de 2013

En el tercer trimestre, la expansión se ubicó en el 23,6%; y el costo de los créditos se encareció unos tres puntos en promedio

Los pesos se convirtieron, desde hace unos pocos meses, en una materia prima cada vez más escasa para los bancos. Y la demanda de todos ellos por obtener algo de liquidez incrementó los costos del dinero y amenaza con complicar aún más el ritmo de la actividad. Los depósitos ya no crecen al ritmo de los préstamos ni de los niveles de emisión del Banco Central. El organismo, a su vez, confirma un sesgo menos expansivo que se le impone ya casi forzosamente, para evitar alimentar la inflación y la fuga al dólar blue. El primer efecto ya empezó a percibirse en una fuerte suba de tasas durante los últimos meses, que se sintió en los préstamos para individuos y para empresas (en las líneas no reguladas).

El proceso de ajuste no parece haber tocado un piso. Este martes, por ejemplo, la tasa de cortísimo plazo que rige para los créditos que los bancos se prestan entre sí (el call money) pegó un salto de 300 puntos básicos y quedó en el 16,5% anual. Ese costo solía subir, levemente, cada principio de mes. Pero desde agosto pasado hasta hoy muestra sobrerreacciones, en esos días, que sólo se explican por una necesidad de pesos que las entidades ven cada vez más preocupante.

Según datos de la consultora Elypsis, del economista Eduardo Levy Yeyati, a fines del tercer trimestre la emisión neta (crecimiento de la base monetaria) fue de sólo 23,5% anual, y registró con esto el menor nivel detectado desde el segundo trimestre del 2010. El último dato oficial disponible, del 18 octubre, muestra una expansión monetaria neutral del 26% anual, que está en línea con el crecimiento del PBI nominal. Simultáneamente, las tasas de préstamos relacionados con el consumo (personales y tarjetas de crédito) muestran, desde abril, una suba de entre 3% y 2%, respectivamente. En algunas entidades incluso -según pudo consignar ámbito.com- el ajuste ya acumula 400 puntos básicos desde julio y no da señales de haberse interrumpido.

"Hoy dejamos de captar una buena cantidad de depósitos por la cantidad de emisiones de Obligaciones Negociables que hay en el mercado. Los ahorros en cuentas a la vista y plazo fijo crecen menos que los préstamos y que la emisión. Hay poca liquidez y las tasas sobrerreaccionan", comentaron a este medio desde la mesa de dinero de uno de los grandes bancos del sistema.

Recién en octubre, después de una escalada de más de 500 puntos básicos en las tasas de los plazos fijos, los bancos notaron un regreso de los depósitos más pequeños (de ahorristas minoristas) y una caída del circulante. Pero aún así los mayoristas, hasta ahora, continúan su desaceleración y se resisten a retomar el ritmo de las buenas épocas.

"Los tenedores de pesos respondieron en octubre a los incentivos de mayores tasas. El circulante comenzó a regresar a los bancos, generando una visible caída en su participación en los agregados ampliados. En septiembre se verificaba una disminución del circulante como porcentaje de la liquidez volviendo a valores más cercanos al período previo al corralito cambiario", destacaron en la consultora Elypsis.

La dinámica no alcanza todavía a equiparar la velocidad que muestran los créditos, alentados en parte por las expectativas de devaluación y de inflación que tienen los particulares. Los documentos (con buena participación de líneas a tasa fija) crecen al 52% anual; los prendarios al 46%; y las tarjetas de crédito, al 41%. 

Fuente: Ambito