ES LA DE PEOR DESEMPEÑO A NIVEL GLOBAL, CON UNA CAÍDA DEL 1,6% EN EL AÑO Y DEL 2,6% EN LA ÚLTIMA SEMANA

El real se queda sin aire en 2010: es la moneda que más pierde contra el dólar en lo que va del año

lunes, 18 de enero de 2010

Fue la reina del 2009 con un avance del 33%. Pero arrancó el 2010 con pocos bríos. Pronostican que terminará el año en 1,75 por dólar, casi sin cambios respecto a los 1,77 de hoy. El impuesto al ingreso de capitales estaría funcionando. El Tesoro advirtió además que usaría el fondo de riqueza soberana para intervenir en el mercado y reforzar la vigilancia de la moneda. Dicen que la suba de tasas este año no le daría alas al tipo de cambio

 No hubo un día de la semana pasada en que el real no se haya debilitado. La seguidilla de cinco ruedas en baja –su peor racha desde agosto– sumó un retroceso del 2,6% y convirtió a la moneda brasileña en la más castigada a nivel global. Después del espectacular avance de 33% del año pasado, en el 2010 el real pierde 1,6% y es también la de peor desempeño en el mundo.

En los últimos días, el mercado brasileño vio con preocupación la decisión de China –hoy principal socio comercial del país– de suavizar el crecimiento del crédito y enfriar la economía vía una suba de encajes bancarios. Esta última semana se supo a su vez que el flujo de inversiones financieras arrojó un saldo neto negativo de u$s 1.000 millones en la primera semana de enero. Brasil recibió u$s 15.500 millones el año pasado, comparado con la salida de casi

u$s 49.000 millones en 2008.

Pero también influyeron las declaraciones del secretario del Tesoro Arno Augustin, quien aseguró que Brasil podría vender deuda local con el objeto de comprar dólares en el mercado. El capital fresco iría a reforzar el fondo de riqueza soberana del Gobierno, que hoy ya cuenta con u$s 9.200 millones. El mes pasado, el presidente Lula autorizó el uso de este dinero para intervenir en la plaza, lo que supone la incorporación de otro actor oficial además del banco central a la arena cambiaria.

Flavia Cattan-Naslausky, analista del Royal Bank of Scotland, cree que el timing de los comentarios –en momentos en que el real en verdad está de capa caída– tienen que ver con el temor oficial a que este retroceso termine abonando el terreno para un repunte furioso, sobre todo teniendo en cuenta que hay unos u$s 3.500 millones en salidas a bolsa esperando pista para estos dos primeros meses del año.

Pero más allá de los movimientos de corto plazo, hoy la expectativa es que el real se mantendrá chato durante este año. Ya no habrá recorridos espectaculares como los del año pasado y en todo caso, habrá margen para cierto debilitamiento. El inicio de un proceso de endurecimiento monetario en Brasil no parece destinado a impactar demasiado en la cotización de la moneda. El mercado espera hoy que la suba de tasas comience en marzo, aunque podría llegar a demorarse hasta mediados de año. En todo caso, explican los analistas, esto ya está más que incorporado en los precios actuales.

El 2010, como todo año electoral, debería poner a prueba estos pronósticos. Pero en Brasil parecen convencidos de que estas presidenciales no traen turbulencia bajo el brazo. Este año, el real se toma un receso.

Alexandre Schwartsman

Es economista jefe del Banco Santander Brasil. Doctor en Economía de la Universidad de California, Berkeley, fue director de Asuntos Internacionales del Banco Central de ese país.

-En 2010, los riesgos para Brasil son mayormente externos, en relación a la posibilidad, muy remota en mi opinión, de una doble zambullida de la economía global. Por el lado doméstico, la cuestión pasa por ver si el crecimiento estará más cerca del 5% o del 6%. El primer escenario permitiría al Central mantener las tasas sin cambios hasta mediados de año, mientras que una expansión mayor incrementa las chances de un alza temprana para lidiar con las presiones inflacionarias.

-En estos tiempos de bonanza, el principal error a evitar es una expansión fiscal sin límites. Los políticos se han convencido de que Brasil se manejó relativamente bien en 2009 (menos de lo que ellos creen, en mi opinión) debido a nuestros defectos (una economía con poca exposición al comercio internacional, bancos en manos del gobierno y un gasto público en constante aumento), dejando muy convenientemente de lado el hecho de que la reducción de la deuda, un tipo de cambio flotante y una inflación bajo control proveyeron de la base necesaria para políticas contracíclicas. El compromiso de estabilidad parece haberse debilitado durante la crisis y yo creo que esto puede convertirse en una problema en el futuro si realmente llegara a desaparecer.

-Definitivamente no espero que la elección tenga un impacto similar al que vimos en la última transición política. El espectro de política económica se ha estrechado considerablemente y ningún candidato tiene hoy una plataforma que abandone la responsabilidad fiscal.

-Espero que el endurecimiento monetario no comience hacia mediados de año (junio o julio) y que la tasa Selic alcance un nivel de 10,75% para fines de 2010. Hoy el mercado espera que las alzas lleguen en marzo y lleven el interés hasta 12-12,5% para diciembre, lo que implica que cualquiera que sea el impacto de la suba de tasas sobre el tipo de cambio, está más que incorporado en la cotización actual. En otras palabras, si nuestro escenario se confirma, el real incluso podría debilitarse un poco. En todo caso, veo el destino de la moneda mucho más ligado a la evolución del precio de los commodities.

Ilan Goldfajn

Es economista jefe del Banco Itaú Unibanco. Doctor en Economía del MIT, fue director de Política Económica en el Banco Central y enseña en la Pontificia Universidad Católica de Rio de Janeiro

-Hoy los principales riesgos que enfrenta Brasil provienen fundamentalmente de la economía mundial, ya que si bien se ha salido de la crisis, la situación todavía no se ha estabilizado y existen muchas dudas. En 2010 habrá que mirar con mucho cuidado cómo está el mundo. Todavía no está claro si al retirarse los estímulos, las economías maduras volverán a una recesión o a un crecimiento nulo, lo que afectará a los mercados emergentes. Esto es algo que habrá que monitorear muy bien este año.

- No creo que la inflación vaya a ser un problema durante este año. Recién en la segunda mitad del 2010 podría empezar a plantearse. De ahí que sería razonable empezar a cuidar este tema durante el primer semestre. De todos modos, la expectativa para este año es que la inflación se ubique justo en la meta de 4,5%.

-Nuestra estimación es que la tasa Selic comenzará a subir en marzo. Pero no creo que esto tenga mayor impacto en la moneda. Me parece que el real ya se ha apreciado bastante y no veo una suba adicional. Además, las tasas más altas ya están implícitas en la cotización actual. Hoy estamos proyectando un real en 1,75 para fin de año, no muy lejos del nivel actual. De todos modos, no creemos que vaya a haber medidas adicionales para suavizar la apreciación. La mejor medida será un ajuste fiscal pero para eso habrá que esperar al 2011.

- Sobre el futuro de Henrique Meirelles no hay definiciones todavía. Podría irse en marzo si es que se presenta como candidato, pero aún no se sabe. De todos modos, la gente está muy tranquila, creo que porque piensan que se quedará hasta el final.

-No creemos que las elecciones de octubre vayan a sumar volatilidad al mercado. Será un proceso electoral muy parecido al del 2006, en contraposición a lo que había sido el del 2002, que produjo mucha turbulencia. Esto se debe básicamente a que los candidatos ya son conocidos y no hay ninguna política muy distinta a lo que estamos viendo hoy.

Fuente: El Cronista