Valor del dinero

Gobierno paga hoy $ 10.300 M y prepara una nueva emisión

jueves, 31 de marzo de 2016

Debe cancelar el BONAC 2016 que emitió la gestión anterior. Recibió ayer a bancos para testear otra colocación.

La presión que volvió a sentirse en las últimas semanas sobre los precios no sólo pone limitaciones al Banco Central para reactivar la economía sino también al Gobierno para financiarse. La menor emisión de pesos, el freno en las asistencias al Ejecutivo (con adelantos transitorios) y las continuas absorciones de dinero que se realizan semanalmente reducen los niveles de liquidez y restringen los recursos fiscales. En estas condiciones, al Ministerio de Economía se le complicó el pago de $ 10.300 millones de un bono que debía cancelar hoy (el Bonac marzo 2016) y citó entonces a cuatro bancos para testear el mercado y planear una nueva emisión.

El contratiempo sorprendió al sistema financiero. En general, cualquier Gobierno toma la precaución de emitir deuda antes de que llegue el vencimiento del título. El Bonac 2016 fue emitido por el kirchnerismo en marzo del año pasado (la primera parte en marzo; la segunda, en mayo). Es un título que está atado a la tasa de interés de la Lebac a 90 días. El rendimiento de esta Letra, que era del 26% anual en el momento en que fue colocado, es ahora 8 puntos porcentuales más alto y llega al 34% anual. El desembolso que deberá hacer hoy el secretario de finanzas, Luis Caputo, es de exactamente el mismo tamaño que el giro hizo el Banco Central al Tesoro la semana pasada (unos $ 10.300 M). El organismo le dio adelantos transitorios que volvió a absorber, en estos días, a través de colocaciones de letras en la licitación del martes y en el mercado secundario.

El manejo de la cantidad de dinero que está haciendo el Banco Central (una meta de "agregados monetarios" antes de pasar a las de inflación) es un obstáculo que encuentra el Poder Ejecutivo para atender sus necesidades fiscales. Para sortearlo, el subsecretario de financiamiento, Santiago Bausili , escuchó ayer por la tarde a un grupo de cuatro bancos, que representan a las mesas de dinero con mayor participación en el mercado. Quería conocer la visión que tienen sobre la situación de liquidez y tasas de interés en el sistema, y sondear las posibilidades de lanzar un nuevo tramo de la emisión del bono en pesos, atado a la Badlar, que coloca mensualmente. Las entidades le proponen, desde hace algunos meses, implementar un nuevo instrumento que le permita resolver las dificultades de financiarse en pesos y, al mismo tiempo, satisfacer a los grandes jugadores en el apetito que hoy tienen por los altos rendimientos. Se trata de un bono a tasa fija, que podría colocarse en el mercado local a un plazo de dos años. Los objetivos, con esto, serían dos: acercar recursos en efectivo a un Poder Ejecutivo afectado por el déficit; y brindar al mercado un mecanismo atractivo frente a un panorama que todos anticipan de tasas más bajas que las actuales. 

Fuente: Ambito