políticas monetarias activas

La aspiradora de pesos del Banco Central se detuvo ante la baja de las tasas

jueves, 21 de agosto de 2014

En momentos en que la plaza emite señales de mayor estrés financiero, la entidad monetaria tuvo que validar una expansión monetaria por $2.100 millones

La aspiradora de pesos del Banco Central (BCRA), aquella que funcionó a pleno hace apenas unos meses para ayudar a neutralizar la corrida veraniega al dólar, dejó de funcionar en el momento más inoportuno.

Justo cuando la plaza cambiaria vuelve a emitir señales de stress (el dólar paralelo cerró a $13,23 para seguir en zona de récords) y la propia entidad enfrenta un cargado calendario de vencimientos de la deuda emitida oportunamente para retirar pesos del mercado.

Apenas una semana después de haber dispuesto la tercera baja consecutiva en las tasas de interés que paga para colocar títulos entre bancos e inversores un precio que se ha vuelto de referencia obligada para el mercado ya que -a partir de él- se define el costo del crédito al consumo, la entidad no logró renovar el total de letras y notas que le vencían y debió convalidar una expansión de $2.100 millones en la base monetaria.

El BCRA ya había mostrado problemas para seguir absorbiendo pesos por esta vía en lo que va de agosto. En las dos licitaciones previas a la llevada adelante ayer sólo había podido esterilizar unos $450 millones netos por semana contra el promedio de $2.300 millones que había retirado por esta vía entre enero y julio.

Pero, la nueva poda aplicada a las tasas de corto plazo la semana pasada (la recortó del 26,80% anual que pagaba hace sólo dos semanas al 25,64% validado en la víspera) terminó de volcar la balanza hacia el lado de la expansión, según consigna La Nación.

El martes, el BCRA licitó nuevos títulos, en un intento por renovar una deuda por $8.900 millones que le vencía. Pero, y pese a otro fuerte aporte del Banco Nación, apenas sólo recibió ofertas de compra para los nuevos y menos rendidores títulos por $8214 millones,

Finalmente adjudicó nuevas letras y notas por $ 8114 millones pese a haber incrementado en unos 30 puntos la tasa que paga a mediano plazo (superiores a los 120 días), al elevarlas del 26,9 al 27,2%. Y si a esa diferencia neta de saldos por $ 768 millones se agrega el monto de lo que debió pagar en concepto de intereses (más de $ 1300 millones), se llega a la expansión por $2100 millones ya mencionada.

"Al haber afectado su propia capacidad de retirar pesos del mercado por la baja de tasas, al BCRA le será muy difícil mantener un crecimiento de la base monetaria bajo, como venía haciendo hasta ahora", apuntó el economista Nicolás Dujovne, que proyecta para lo que resta del año, por este tipo de razones, un aumento de la base monetaria cercano a los $100.000 millones que contrasta contra la contracción de $5.500 millones registrada hasta fines de julio. 

Fuente: iProfesional