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Lorenzetti: la regulación de las cajas de seguridad protegerá al ahorrista mejor que ahora

jueves, 20 de septiembre de 2012

El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, afirmó ayer que el nuevo Código Civil " no desprotege" a los titulares de cajas de seguridad en bancos, sino que éste "estará mejor protegido que ahora".

"En el nuevo Código, el banco podrá pactar una cláusula para limitar su responsabilidad frente a los clientes. Eso también ocurre ahora. Pero el proyecto establece que esa cláusula no puede ser ridícula ni abusiva, porque el cliente es un consumidor. Además, no sería válida, tampoco, una cláusula que exima al banco por un robo, porque el proyecto le impone expresamente el deber de custodia", aclaró Lorenzetti.

El nuevo texto incorpora un capítulo relativo al servicio de cajas de seguridad, un contrato que actualmente no está regulado. Bajo la influencia del Gobierno, el Código intenta limitar la responsabilidad de los bancos con la intención de infundir desconfianza entre los titulares de cofres, de modo de que vuelquen sus ahorros al sistema financiero.

Lorenzetti, presidente de la Corte y, también, titular de la Comisión de Juristas que elaboró el nuevo Código, atribuyó esa interpretación al interés de "algunos estudios jurídicos en que haya mayor litigiosidad".

En la actualidad, todo lo relativo a la seguridad de las cajas de seguridad y la responsabilidad de los bancos surge de lo que se fue estableciendo a través de fallos judiciales, que básicamente se dictaron a medida que ocurrieron hechos delictivos, reclamos penales y civiles.

En el nuevo Código, en cambio, el contrato estará específicamente regulado en los artículos 1413 a 1417.

El artículo 1413 dice que el banco "responde frente al usuario por la idoneidad de la custodia de los locales, la integridad de las cajas y el contenido de ellas, conforme con lo pactado y las expectativas creadas en el usuario. No responde por caso fortuito externo a su actividad ni por vicio propio de las cosas guardadas".

Es decir, el banco puede pactar con el cliente un límite a su responsabilidad, algo que las entidades también hacen bajo el sistema actual. Este límite suele ser, ahora, de unos 50.000 dólares.

En segundo lugar, en la norma se aclara que el banco será responsable por "la idoneidad de la custodia de los locales, es decir, por el accionar de la policía, las alarmas y la seguridad de todo el local", explica Lorenzetti.

"Este último punto también ha sido una defensa de los bancos: respondo por la caja, pero no por el contenido. En el proyecto se lo hace responsable por la custodia del local, la caja y el contenido, pero además no sólo conforme a lo que el banco piensa, sino conforme a las expectativas que tiene el consumidor", aclara.

El ahorrista podrá recurrir a cualquier medio de prueba para acreditar cuál era el contenido que tenía guardado en el cofre.

REASEGUROS

¿Cuál es el monto al que los bancos podrán limitar su responsabilidad? El nuevo Código no lo aclara, pero Lorenzetti sostiene que "no puede ser abusivo, por bajo. Ni ridículo".

Además, como la apreciación del carácter abusivo de la cláusula se hace caso por caso, es posible que un juez, para un cliente medio, resuelva por ejemplo que un límite de 50.000 o 60.000 dólares es aceptable y que, frente a otro ahorrista de una muy reconocida y superior solvencia, ese mismo límite pueda ser considerado abusivo. Algunos juristas que participaron en el proyecto dicen que "es aceptable hacer esta diferente apreciación".

El hecho de que el nuevo Código diga que el banco "no responde por el caso fortuito externo a su actividad ni por vicio propio de las cosas guardadas" no agrega nada nuevo. Si hay un caso fortuito, por ejemplo, si el banco se incendia, en la actualidad no es responsable. Y lo mismo ocurre si el ahorrista guardó en el cofre algo impropio, como por ejemplo una batería que deteriora lo allí guardado.

Pero si, por ejemplo, "un boquetero ingresa en el banco, eso no es un caso externo a la actividad, sino que es algo previsible", dice Lorenzetti.. 

Fuente: La Nación